La razón por la cual Vidrio serigrafiado puede obtener propiedades de alta resistencia y protección de seguridad se debe principalmente a un eslabón crucial en su proceso de producción: el tratamiento de templado térmico a alta temperatura. Este paso del proceso no es sólo un simple tratamiento térmico del vidrio, sino una serie de procesos complejos que están diseñados con precisión y estrictamente controlados.
Primero, profundicemos en los principios básicos del templado térmico a alta temperatura. Como material inorgánico amorfo, las propiedades físicas del vidrio cambian significativamente con los cambios de temperatura. Cuando el vidrio se calienta a una temperatura cercana pero inferior a su punto de reblandecimiento, su estructura interna comienza a cambiar, las conexiones entre las moléculas se vuelven más estrechas y comienza a formarse una capa de tensión de compresión en la superficie del vidrio. La formación de esta capa de tensión de compresión se debe a la diferencia en el coeficiente de expansión entre la superficie y el interior del vidrio durante el proceso de calentamiento. Como resultado, durante el proceso de enfriamiento rápido posterior, la superficie se comprime y el interior se expande relativamente, formando así un estado de distribución de tensiones internas y externas. .
Este estado de distribución de tensiones se aprovecha inteligentemente durante el proceso de templado térmico a alta temperatura del vidrio serigrafiado. Al controlar con precisión los parámetros de calentamiento y enfriamiento, como la temperatura, el tiempo y la velocidad de enfriamiento, se puede formar una capa de tensión de compresión uniforme y estable en la superficie del vidrio, mientras se mantiene un cierto estado de tensión de tracción en el interior. Esta distribución de tensión no sólo mejora significativamente la resistencia a la flexión y al impacto del vidrio, sino que también permite que el vidrio disperse y absorba energía de manera más efectiva cuando actúan sobre él fuerzas externas, reduciendo así en gran medida el riesgo de rotura.
Además, el tratamiento de templado térmico a alta temperatura también puede curar y proteger los patrones serigrafiados. Durante el proceso de calentamiento, la resina y otros componentes de la tinta reaccionan químicamente para formar una fuerte unión con la superficie del vidrio, asegurando la durabilidad y estabilidad del patrón. Al mismo tiempo, el tratamiento a alta temperatura también puede eliminar los volátiles residuales de la tinta, mejorando aún más la claridad y la calidad del patrón.
El tratamiento de templado térmico a alta temperatura tiene requisitos estrictos sobre el tipo de vidrio y las propiedades de la tinta. Los diferentes tipos de vidrio tienen diferentes puntos de reblandecimiento y coeficientes de expansión, por lo que es necesario seleccionar temperaturas de calentamiento y velocidades de enfriamiento adecuadas. De manera similar, la resistencia a la temperatura y la estabilidad química de la tinta también son uno de los factores clave que afectan el efecto del templado térmico a alta temperatura. Por lo tanto, en el proceso de producción real, se deben considerar de manera integral múltiples factores, como el tipo de vidrio, las propiedades de la tinta y los requisitos del producto, para garantizar que el tratamiento de templado térmico a alta temperatura pueda lograr los resultados esperados.
El tratamiento de templado térmico a alta temperatura es uno de los pasos clave para que el vidrio serigrafiado obtenga propiedades de alta resistencia y protección de seguridad. Al controlar con precisión los parámetros de calentamiento y enfriamiento, se puede formar una capa de tensión de compresión uniforme y estable sobre la superficie del vidrio, mejorando así su resistencia a la flexión y al impacto. Al mismo tiempo, el tratamiento de templado térmico a alta temperatura también puede solidificar y proteger los patrones serigrafiados, mejorando aún más la calidad y estabilidad del producto.